jueves, 11 de agosto de 2016

¿Escuelas sin bebederos?

El Economista
Sección. Política y Sociedad
Autor. Alberto Aguirre
Columna. Signos Vitales
Página 45

09 de agosto de 2016

¿Escuelas sin bebederos?

Es la región 5. Las partidas 1, 2, 3, 4, 5 y 6 comprenden las escuelas públicas de Campeche, Guerrero, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán. La SEP había llamado -el pasado 31 de mayo- a la Iniciativa Privada para concursar por la instalación y mantenimiento de un sistema de bebederos con flujo continuo de agua en las escuelas públicas de esas ocho entidades federativas.

En ciernes, el lanzamiento del nuevo modelo que normará los contenidos y materiales educativos. También, el movimiento de resistencia a la evaluación de los docentes. Y 50,000 millones de pesos, ya etiquetados, dentro del programa Escuelas al 100, para el mejoramiento de esos planteles, incluidas acciones para mejorar los servicios educativos, pintar (o en su caso poner techo) paredes y enrejados, además de la dotación de agua potable.

Por cada escuela -según cálculos de los proveedores- las autoridades educativas destinarán entre 1.5 y 2 millones de pesos. Y gastarán 100,000 por cada bebedero hasta el final del sexenio. Ese monto cubrirá su instalación, los servicios de mantenimiento -preventivo y correctivo- y el monitoreo de la calidad del vital líquido. Y es que los bebederos escolares deben ser fabricados con acero inoxidable y estar equipados con sistemas integrados de filtración y purificación de agua, de acuerdo con los requerimientos del Programa Nacional de Salud Contra el Sobrepeso y la Obesidad, en el marco del Acuerdo Nacional Para la Salud Alimentaria. Y Además deberán suministran agua potable en los parámetros contenidos en las NOM 127-SSA1-1994 y 180-SSA1-1998.

Uno de los programas más nobles de la administración peñista, empero, está en riesgo de verse suspendido. Una semana después de haber convocado para instalar los bebederos en las escuelas de la región 5, la entidad convocante -el Instituto Nacional de Infraestructura Educativa- citó a los representantes de las empresas interesadas a un recorrido por los “sitios de trabajo”. Las escuelas seleccionadas en Chilpancingo, Tuxtla Gutiérrez, Oaxaca capital y Xalapa estaban cerradas, por las movilizaciones magisteriales. No obstante, los representantes de las empresas faltaron a la cita.

Para entonces ya se había conocido el funesto resultado de ejercicios similares en Michoacán, donde los trabajadores de las empresas que acudieron a instalar el mobiliario literalmente fueron perseguidos por las bases magisteriales y padres de familia que mantenían tomadas primarias y secundarias purépechas.

Pero el mejoramiento de los planteles educativos es un compromiso presidencial que prohíbe impavidez o pavuras. Y entonces, el 14 de julio el INIFED asignó cuatro de las seis partidas (cada una, en promedio, para instalar 800 bebederos en un plazo máximo de 100 días); tres de ellas, para Rotoplas, y una para el corporativo Nebraska 24 Horas. Las partidas 2 y 4 fueron declaradas desiertas.

Un mes antes el INIFED definió cuatro partidas para englobar las escuelas públicas de la Ciudad de México, Hidalgo, Morelos, Puebla, Tlaxcala y el Estado de México, correspondientes a la región 4.

La convocatoria fue difundida el 10 de mayo del 2016. Y la publicación de los ganadores ocurrió el 14 de junio: Rotoplas, Maquinaria de Láminas y Productos de Acero, los consorcios representados por GH Maquinaria y Equipo y Grupo Internacional de Diseño y Fabricación de Muebles Especiales (los dos últimos ya habían ganado las partidas de la región 2, correspondiente a Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Durango y San Luis Potosí).

A diferencia de las cuatro licitaciones que se han concretado, para la región 4 hubo un concursante que rechazó el fallo del INIFED: Grupo Integral Dragde -afincado en el Estado de México y presidido por el empresario Edgar Rafael Huerta Peña-, que buscó quedarse con dos partidas, para cubrir planteles educativos en territorio mexiquense y Morelos.

Justo hace un mes sus representantes tramitaron un amparo. ¿Para reclamar el fallo de la licitación? Sí, pero también para impugnar que las autoridades federales hayan convocado al mejoramiento de las escuelas públicas al amparo de la nueva Ley Federal para la Infraestructura, en vez de la Ley Federal de Adquisiciones y Obra Pública.

El empresario mexiquense, a través de sus abogados, reclama que el instrumento jurídico invocado por el INIFED no contempla la figura de inconformidad y limita la atención y resolución de cualquier queja al fallo del Órgano Interno de Control de ese órgano adscrito a la SEP.

“El resultado de las licitaciones es poco transparente, sin sustento jurídico en la Ley de Adquisiciones”, estableció en su escrito de demanda, tramitado el 7 de julio, mismo que fue turnado a la ponencia de Fernando Silva García, juez octavo de Distrito en Materia Administrativa, del primer circuito.

En el expediente 1175/2016, Grupo Integral Dragde reclama la responsabilidad de ambas cámaras del Congreso de la Unión, en tanto que aprobaron el artículo 7 de la Ley General de la Infraestructura Física Educativa, misma que fue promulgada por el Ejecutivo federal. Y en su doble carácter de ordenadores y ejecutores del fallo de la licitación pública SB-004-2016 fueron demandados el director general del Instituto Federal de Infraestructura Física Educativa, Héctor Gutiérrez de la Garza, y su subgerente de presupuesto y contratación, Eduardo Becerril Estrada.

Los bebederos deberían quedar instalados antes de las vacaciones decembrinas. El juzgador negó la suspensión provisional, por lo que es inminente el inicio de los trabajos en las escuelas públicas de Morelos y el Estado de México. En caso de que el amparo sea concedido, la agenda de siete prioridades planteada por el gobierno de la República para instrumentar la reforma educativa sufriría un severo revés.

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